jueves, 7 de noviembre de 2013


¡HOLA A TODOS!

Como ya dijimos, vamos a ver algunos ejemplos de la escultura
egipcia. Por un lado vimos la escultura de Rahotep y Nefret, a continuación veremos las características de un escriba.



El escriba era caracterizado por ser la persona que se encargaba de escribir todo lo que el muerto iba contestando sobre las preguntas que se le hacían en el libro de los muertos.

Aunque estos no formaban parte de las altas dignidades palaciegas y administrativas, el funcionario perpetuado en esta estatua había alcanzado una posición de respecto en la burocracia estatal y el favor del faraón, que extendió hasta él el derecho a la vida futura.


En cuanto a sus características generales vemos:

La estatua nos representa a un escriba en la posición de trabajo: 
sentado, pero con el torso erguido y con las piernas cruzadas, es decir refleja una estructura piramidal con un eje de simetría en ambas partes iguales
.
Es una escultura de bulto redondo, (se puede ver bien desde todas 
las perspectivas)  y en posición sedente, sentada sobre sus propias piernas. Se reproducen algunos detalles, como la obesidad abdominal de aquellas personas que realizaban una actividad sedente.

En cuanto a sus vestiduras, podemos ver que la estatua lleva  
únicamente un faldellín blanco que deja ver las rodillas. No lleva calzado. Sobre la falda aparece un rollo de papiro desenrollado.

Destaca  en esta figura el detalle del rostro, al que contribuyen la policromía y la energía de su mirada, conseguida con fragmentos de cristal de roca muy pulimentados. A ello se le unen  unas grandes orejas, labios finos y nariz proporcionados todo ello obedece a la ley de la frontalidad. Presenta gran hieratismo, y en su cara una expresión de escucha.

Llama la atención el colorido que reúne: predominan los tonos 
oscuros para cabellos y pupilas, el tono rosáceo de su piel, que se nota en la desnudez de la figura. Esta característica dota a la representación de un mayor grado de naturalidad, es ahí donde vemos que se trata de una estatua no oficial.


En consecuencia, podemos ver que la obra manifiesta los rasgos característicos de la escultura egipcia